L.A. Park noqueó al Mesías

Dos de de los estandartes de la Triple A regresaron al ring de la arena Naucalpan, para darle continuidad a una rivalidad que ha sacado chispas en cada lugar en el que se han presentado. L.A. Park, más rudo que nunca, llevó por socios a Eterno y Mosco X-Fly, para enfrentar a uno de sus Némesis, el Mesías, quien se hizo acompañar por Trauma I y el Hijo del Pirata Morgan.

La batalla inició de manera complicada para el equipo de los tijuanenses y L.A. Park, pues el huesudo se equivocó y agredió a Eterno, creyendo que éste formaba parte de la esquina contraria. Dicha confusión fue bien aprovechada por el Mesías y sus socios, quienes impusieron su ley en la primera caída.

Trauma le dio una buena repasada a Eterno, y posteriormente se coordinó a la perfección con el Hijo del Pirata Morgan, quien remató con un ancla a Eterno para dejarlo fuera de combate en la primera caída. Mesías hizo lo propio con una dura tacleada sobre L.A. Park y Trauma remató a X-Fly con toque de espaldas.

Para la segunda caída los rudos finalmente pudieron coordinarse, y al son de tres contra uno tomaron el control de las acciones. Fiel a su estilo, L.A. Park comenzó a repartir cinturonazos y posteriormente se valió de sillas y botes de aluminio para mermar la resistencia de sus rivales y llevar a su equipo al empate.

Herido en su orgullo, el Mesías se encargó de comandar la reacción en el episodio final, donde los técnicos se cobraron cada una de las afrentas recibidas. No obstante, ésta resultó infructuosa, pues L.A. Park tenía un as adicional bajo los huesos. El enmascarado aprovechó que Eterno y X-Fly sacaron al réferi Reyes Rosas del cuadrilátero y que el Grillo estaba reclamando la acción de los tijuanenses, para sacar un bóxer y con éste noquear al Mesías. El Grillo, quien no apreció el golpe con el objeto prohibido, contó los tres segundos y dio por buena la victoria ruda.

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